17 de maig 2018

La tevetrestorra

Resultat d'imatges de tv3

El tiempo que llevo sin ver Tv3 ya se cuenta por años. Decidí no sintonizarla nunca más hace algo más de dos, cuando la deriva sectaria se agudizó hasta límites insospechados, insoportables. Tardé en tomar mi decisión: en parte, porqué me resulta difícil soslayar cualquier forma de información y en parte porqué creo poco inteligente tomar decisiones en negativo. Pero todo tiene su límite. Y, además, en esos asuntos me comporto como dicen que se comportaba la caballería rusa en tiempos de la primera guerra: tardaban un montón en subirse al caballo pero una vez montados no había quien les detuviera. Pues eso: se terminó Tv3 en casa. (La verdad: teniendo Filmin ¿quién quiere tv3?).

Vuelvo a los "límites insoportables" que he nombrado, porqué creo que debo explicarlo mejor. A mi no me molesta que un canal de televisión tome partido por una opción política. Me parece legítimo y genuino. Lo que no creo que debamos soportar es que ese canal, pagado con los impuestos de todos, decida actuar como el órgano de propaganda de una sola opción. Que ni tan solo es mayoritaria. Aquí hay algo muy grave que está fallando. Si se trata de un canal público, la opción ya no es legítima.

No se trata de la "pluralidad" escandalosamente ausente de sus debates, en los que por cada tres independentistas hay un soberanista y, a veces, un equidistante. Se trata de todo: del tono de los informativos, de los reportajes. Incluso la publicidad del canal ha tomado un cariz casposo, que huele a sociedad tan secreta como cutre, a "tu ya me entiendes porqué eres de los nuestros".

Se trata del respeto por el dinero público, por el sentido de lo público. Lo que es de todos. De todos los que pagamos impuestos: altos, bajos, feos, guapos, rubios y morenos, de origen semítico o ario, de expresión catalana, castellana, árabe, urdu, wolof o rusa, expoliadores y expoliados, con accidente en la cadena de ADN o con una impecable herencia racial impoluta. Lo que se mantiene con el dinero de todos no puede ir dirigido a una parte, y con una voluntad seriamente excluyente. En este sentido, yo no se de qué se escandalizan quienes se escandalizan de los tuits del nuevo MHP, cuando esas ideas llevan años surcando los meandros de la Tv3, a veces por la superficie de las aguas y, otras, por lo subacuático.

Hace un tiempo, al principio de tomar la decisión de borrar la Tv3 de mi lista de canales, se me ocurrió escribir en Facebook que quizás se podría promover una campaña para hacer objeción fiscal a Tv3, y negarnos a pagar la parte de nuestros impuestos que se destinan a mantener la cadena. Me riñeron enseguida, y yo enseguida suspendí mi proyecto. Cuando lo recuerdo, me sonrío: quienes me riñeron eran personas próximas (incluso muy próximas) al PSC. Su argumento, que escuché y acepté enseguida, era este: es muy delicado o incluso peligroso decidir para qué pagamos impuestos y para qué no, ya que eso, si uno lo piensa bien, podría desembocar en objeciones fiscales tremebundas. Imagínense ustedes que la clase alta decide no pagar la parte de los impuestos que se destinan a la sanidad o la educación públicas: eso sería el desastre, y el principio del fin del estado democrático.

De forma que: acepto que con mis impuestos se mantenga un canal de tv. Pero que sea pública, por favor. Suplico que sea pública. Que se sienten a hablar de ello esos que reclaman "diálogo con España" pero que, a su vez, han extinguido el diálogo con Cataluña. Lo que tenemos aquí no es un conflicto entre catalanes y españoles: es un problema entre catalanes y catalanes.

Lo digo hoy, día de la investidura del nuevo MHP, y antes de que el ambiente en Cataluña se caldee todavía más, ya que el MHP parece un caldeador visceral (¡jamás he deseado tanto equivocarme y jamás he temido tanto estar acertando!). Por favor: hablen. Y que la Tv3 retransmita el diálogo.

7 comentaris:

  1. Si no la veus des de fa tant de temps, ¿com ho saps que TV3 és el que dius que és?, publicitat inclosa. És l'ùnica de tot el país on els informatius són mínimament dignes i té programes interessantS. En el meu cas és a l'inrevès, abans no la miraba i ara cada vegada la miro més, dins del poc que jo veig la tele, i ja saps que no sóc pas sospitos d'indepe.

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  2. No debes preocuparte. Dentro de poco , cuando la Sra Terribas o la otra señora que le hace de calco, la Melero, salgan a dar la propaganda de rigor, dirán: Aquesta és la televisió pública de Catalunya al 48%.
    Así, irán subiendo o bajando porcentajes según las encuestas, estas que ya sabes a todos dan ganadores aunque les quiten 10 escaños.
    Veo la 2 (que dan pelis y programas muy buenos, a mi entender) y veo Thalassa del 33, que por cierto ya han puesto el programa en horario vampírico.
    Ahhh, por cierto, ya le estoy cogiendo manía al de la sexta (Farreras) con tantos ademanes y tan alarmista. A veces pare el canal de "El Caso", dirigido por Mariano Rubio.
    Por lo demás poca tele se ve en casa.
    Salut

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  3. Totalmente de acuerdo. TV3 se ha convertido en "teleprocés" desde que Más arrancó este asunto allá por el 2.012.

    Y ha contribuido mucho al "aldeanismo mental" de los separatistas mas radicales, dando siempre una imagen victimista de la situación política en Cataluña. Solo les falta colocar de fondo musical en los telediarios el "Va Pensiero" de la opera Aida, el triste lamento de los esclavos judíos que sufren bajo el cruel yugo de Nabucodonosor/Rajoy.

    Solo consumo los documentales del Canal 33, que a pesar de todo, siguen teniendo una calidad impecable.

    Y no quiero saber que pasara ahora con TV3, cuando ha asumido el poder por delegación el panfletero de Torra.

    Saludos.

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  4. Por cierto, nuestro "amable" president que tanto arremete contra "los andaluces que viven de las subvenciones", quizás deberia mantener la boca cerrada :

    https://www.msn.com/es-es/noticias/espana/torra-un-mago-de-las-finanzas-o-c%C3%B3mo-hacerse-un-patrimomio-declarando-p%C3%A9rdidas/ar-AAxrGAu?li=BBpmbhJ&ocid=mailsignout

    El despilfarro del dinero público ya empieza a ser desesperante.

    Saludos

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  5. Una solución podría ser convertirla en canal privado y de pago. Así se nutriría solo del dinero de los adictos.

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  6. Mi primera intervención en este blog. Gracias,Lluís. Es un trabajazo y un espacio precioso.
    Las teles y radios públicas serían un bien deseable si hicieran su función, peeero la realidad, al menos en España, y salvo alguna excepción que se me escape, es que sólo son los altavoces de los gobernantes de turno, sean del país, comunidad autónoma, ciudad o barrio.
    Antes de venir a Cataluña viví en el País Vasco y en Madrid. Además de telePNV, digo ETB, los mayores ejemplos para mí de manipulación en un medio público fueron la TVE de Aznar y la Telemadrid de Espe. Eran medios de manipulación palmaria. Bien. Claro, no conocía TV3. Lo de esta tele es de traca. Es el Nodo. Catalán, eso sí. No he visto nada igual en España.
    A pesar de eso, hay una diferencia. Y es algo muy importante. En Madrid los trabajadores de las teles públicas protestaban, se manifestaban, expresaban que no estaban para nada de acuerdo con la basura que les obligaban a producir y emitir. En Cataluña sólo escucho un pavoroso silencio. Algo parecido a una carta de ajuste mental.
    Me da a entender una de dos cosas: o bien los criterios de selección en las emisoras públicas en Cataluña siguen un escrupuloso nacionalismo, nada que me sorprenda a estas alturas, o bien el miedo a levantar la voz en Cataluña es mil veces mayor que en Madrid. Ninguna sorpresa tampoco. Creo que desgraciadamente son las dos a la vez. Estamos en Sicilia, tetes.
    Encima nos cuesta un ojo de la cara. Yo cerraría todas salvo Radio 3.
    Salud

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  7. Ante todo, gracias por tus elogios.
    Está claro que deberíamos tener un debate sobre el uso y la función de los medios públicos. Es un debete que no debería existir, pero visto el mal uso que se les da, va a ser imprescindible. Algún día.
    Yo también creo que el caso de tv3 es peor que el de teleMadrid, aunque por decir eso a más de uno le vendrán ganas de darme una paliza. pero es mi impresión.
    Hay que retroceder un poco en el tiempo y recordar que Tv3 la fundó Pujol. Pujol es un hombre ladino y muy desconfiado, que siempre procuró rodearse de fieles aduladores. Quienes discrepaban de la odebiencia ciega al amo (aunque fuese solo un poco) eran apartados. Tv3 siempre pagó sueldos muy generosos, por encima de la media nacional, y creó un enorme aparato de cargos. Algunos de ellso merecerían un buen reportaje. Uno de ellos pasó de chófer del MHP a alto directivo de la tele.
    Finalmente, ahí lo tienes, una estructura enorme, macrocefálica, endogámica, sumisa y obediente, destinada a complacer al amo. Solo hubo algo de crítica durante un breve tiempo: el de los gobiernos de Maragall y Montilla, con lo cual está todo dicho. Tenemos un monstruo sectario pagado con el dinero de todos.
    Yo estaría de acuerdo con tu propuesta: salvamos Radio 3 y las demás, privadas y de pago.

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