13 d’abr. 2018

Soy un mal catalán



Desde hace más de una década mi profesión es la de maestro de primaria, en Catalunya. Mi labor consiste en educar a niños de suburbios de esa Catalunya rica y plena, aunque muchos de esos niños no disponen de agua caliente ni de calefacción en sus viviendas. Algunos de ellos no disponen ni tan solo de agua corriente. Ni sus progenitores de cuenta corriente. Sus viviendas son chabolas edificadas verticalmente y ascienden hacia el cielo de la pobreza. A esos niños y a esas niñas que se pasan los inviernos sin calefacción les enseñamos a hablar y a escribir en catalán. Esa es mi profesión.

Pero sin embargo soy un mal catalán.

Antes de dedicarme a la docencia, trabajé en otros asuntos. Trabajé en una institución que promovía el conocimiento de la lengua catalana entre los adultos. Entre los adultos mayormente inmigrados. A lo largo de mi vida he escrito y he publicado varios textos de pretensión literaria. Al principo para niños y jóvenes, y luego para adultos. Todo lo que he publicado en papel lo he publicado en lengua catalana. Pero sin embargo soy un mal catalán.

Soy un mal catalán y me lo dicen así: eres un nacionalista español, eres un defensor de la violencia y de la represión contra los buenos catalanes.

Un día me cuestionaron si era más catalán que español y llegué a la conclusión de que jamás me había planteado el dilema: para mi, ser catalán era compatible con ser español. Me sentía bien siendo catalán y español. Cervantes, Vargas Llosa, Sagarra, Villalonga (Llorenç), García Márquez, Goytisolo, Marsé, García Lorca, Pla, Antonio Soler, Gil de Biedma, Ferrater, Ortega y Gasset, Max Aub y tantos otros me acogían en su cultura multilingüe. Me sentía bien con todos ellos. Con todos ellos reunidos. Juego reunidos Geyper. Esa fue la edad de oro.

Me sentía bien en esa cultura que se expresa en más de una lengua.
Pero sin embargo me dijeron que yo era un mal catalán. Insistieron en ello.

Que yo soy un mal catalán me lo dijeron personas que yo desconocía, y que solo sabían de mi que yo no era un nacionalista catalán, que yo no votaba a los partidos nacionalistas, que yo no llevaba un lacito amarillo en la solapa. Esas personas me pusieron muy difícil ser catalán, porqué le pusieron límites y condiciones a ser catalán.

Hace pocos días, el escritor Valentí Puig explicó que el auge dels nacionalismo catalán no ha llevado a un aumento de la compra de libros en lengua catalana, que sigue decreciendo. La cultura catalana se está empequeñeciendo y tiende a la desaparición. El profesor Jordi Llovet lleva años denunciando el ocaso de la cultura en Cataluña. El poeta Salvador Oliva dice lo mismo. Nos encontramos ante la decadencia más aguda de la cultura catalana, una cultura que sobrevivió al franquismo y que perecerá ante el nacionalismo catalán. El nacionalismo catalán matará a la cultura catalana y nos dejará una cultura zombi.

Vengo insistiendo en ello desde hace tiempo pero sin embargo soy un mal catalán.

No me quedan muchos años hasta llegar a la edad de la jubilación. En cuanto la alcance, creo que me iré a Portugal. Los portugueses me gustan mucho. Portugal me parece mucho mejor que Cataluña. Son más cultos y más inteligentes que los catalanes. Su cultura es enorme. Y son acogedores, agradables, políglotas, abiertos, humildes, tolerantes. Son todo lo que no son los buenos catalanes.

Ya que no puedo ser un buen catalán, quizás algún día podré ser un buen portugués.

22 comentaris:

  1. Recorda el que es deia: l'autonomia que ens cal, és la de Portugal. Portugal és un bon lloc on viure de jubilat, ja em deixaràs l'adreça que et vindré a veure. Tampoc sóc un català exemplar.

    ResponElimina
    Respostes
    1. Bromes a banda, Portugal em sembla un lloc fenomenal. Són pocs, són cultes, estan tranquils i se n'han sortit de la crisi financera augmentant el salari mínim, i no tenen conflictes regionalistes. Si els nostres patriotes s'haguessin fixat en Portugal, otro galo nos cantaria.

      Elimina
    2. Doncs mira sí, Portugal podria ser un bon exemple per a la futura República catalana: serem pocs, políglotes (bé, sempre hi haurà algun monolingüe que només parli castellà) i no tindrem conflictes regionals (espero que la broma de Tabarnia acabi aviat). Ep! I no cal tenir DNI espanyol per gaudir de la literatura espanyola ni de Vargas Llosa. Jo gaudeixo de Shakespeare i no sóc anglès, no sé si m'explico.

      Elimina
    3. La broma de Tabarnia acabará cuando acabe la broma de la republica ficticia catalana

      Elimina
  2. En mi ultima entrada, hablo de cultura y "cultureta".

    "Cultureta" es lo que se ha estado promoviendo desde la conselleria de turno desde hace muchos años. La ventaja de la "cultureta" para los políticos, es que es manejable a base de subvenciones y de promoción desde los medios de la Generalitat. Y además, se aseguran de que sus paniaguados jamás los criticarán abiertamente, nadie muerde la mano que le alimenta.

    Nadie en su sano juicio fuera de aquí, entiende que se pueda marginar a una parte de la intelectualidad catalana sencillamente porque escriba en un idioma "políticamente incorrecto" para los que gobiernan.

    Por cierto, yo también soy un "mal catalán". En otro tiempo, me habrían tildado abiertamente de "charnego", por no tener los ocho apellidos catalanes, y por no votar independentista. Ahora lo siguen pensando, pero no se atreven a decirlo en voz alta, no vaya a ser que se les vea claramente la vena supremacista.

    Saludos.

    ResponElimina
    Respostes
    1. Hace muchos años, Boadella, que es un visonario, pronosticó el futuro de la cultra catalana y vió el advenimiento de la "cultureta", que era el sueño de Pujol, el Ubú president que les tenía a tos encandilados. Se trata de una cultura en miniatura, nacionalista sin fisuras, sin referencias al conflicto social. Una cultureta de zapatillas y albornoz. Es la cultura que predomina en Cataluña. Empar Moliner se considera escritora y Mònica Terribas, periodista. Cultureta. Decadencia sin fin. Un día contaré el nivel de los festivals literarios regionales, con categoría de "nacionals". Subcultura tribal, endogamia, odio, caverna. Horror. Nos han llevado hasta el borde del abismo y proclaman que debemos dar un paso al frente.

      Elimina
    2. L'autor ha eliminat aquest comentari.

      Elimina
  3. Pues a mi, amigo Rodericus, jamás podrán tildarme de charnega porque mis 8 apellidos, incluso los 16 son catalanes, por eso les escuece tanto que sea una mala catalana. Rectifico: dicen que soy una mala catalana.
    Para mi, los malos son ellos. Los que han puesto uns barrera entre unos y otros. Los que al abrigo del manual del buen catalán se han cargado una autonomía que funcionaba. Los que utilizan la lengua com un arma que dispara contra los que no la utilizan. Los que se otorgan la verdad absoluta y pasan de la autocrítica. Los que se sienten por encima del resto.
    Si ser buen catalán es sinónimo de radical, fanático, sumpremacista y agilipollado en busca de un mesías que les guie, prefiero ser mil veces una catalana en excedencia, sin patria y sin bandera.

    ResponElimina
    Respostes
    1. Recuerdo cuando leí la expresión de poeta Ferrater: "quisiera ser como una charnego". Ese "como" me exasperaba porqué no lo comprendía. Ahora lo comprendo. Vaya si lo comprendo. Jamás podré ser un charnego, solo puedo aspirar a ser "como" un charnego. Esa es la maldición de los que nacimos aquí.

      Elimina
  4. Epppppppppppppppppp¡¡¡ Conozco un buen catalán que es ex-honorable y que a la fin acabó siendo un mejor andorrano.

    ResponElimina
    Respostes
    1. Yo conozco a uno que, sin llegar a ser honorable, fué luego belga a medias y ahora alemán a la fuerza. Eso de ser un buen catalán es muy complejo y exige mucha internacionalidad

      Elimina
  5. Ep a Portugal jo hi he viscut 4 anys i m'hi exiliaré en ser gran (Lluís, tu hi aniràs abans que jo, pel que sembla). Tot i això, un dia hem de comentar alguns moviments separatistes que hi va haver sobretot a Açores i Madeira i com la CIA hi estava implicada. Ras i curt, si el 1975 les eleccions les guanyaven els comunistes (finalment després de l'estiu calent les guanyaren els socialistes) hi havia una invasió prevista d'Açores i Madeira. Era un pla de Heny Kissinguer i l'objectiu era evitar una base de míssils que pogués arribar als EUA. Per això inflaren de diners els partits independentistes de les dues regions. Un d'ells era presidit per Alberto Jõao Jardim, l'etern president de Madeira per la dreta portuguesa. Una història que mereix un cafè o una cervesa...

    ResponElimina
    Respostes
    1. Sobre les males arts (o les arts, a seques) d'en Kissinger estic disposat a creure-m'ho tot. Quina gran personatge ens va deixar el jueu! Trobo molt interessant aquesta història de Madeira i les Açores, i ho dic seriosament. M'agradaria escriure sobre independentismes però fer-ho sobre Catalunya és un error, per allò de la distància que cal prendre... Em sona haver llegit alguna cosa al respecte, però estic segur que el teu relat ha de ser molt suggerent. Estaria molt bé això del cafè o la cervesa, a veure si trobem el moment! per parlar de les illes portugueses i d'altres qüestions, es clar.

      Això de l'exili a Portugal... jo espero aprofitar la jubilació, si és que arriba abans que la Parca, és clar. I en aquest sentit sí, a mi (la jubilació i després la Parca) m'haurien d'arribar abans que tu per llei natural, però els seus designis són indesxifrables. Per si de cas, parlem-ne aviat...!

      Elimina
  6. Potser ens trobem a Portugal d'aquí a poc, estimat professor.

    ResponElimina
  7. Jo també soc una "mala catalana" imaginat després de ser una renegada (per ser l'unica de la meva familia que va deixar-se anar amb el catalá, que va triar una escola catalana per las seves filles abans de tot aixó de l'inmersió lingüistica) vaig arrivar fins I tot a pensar en català, a escriure els meus relats en català, però ahora resulta que soc una xarnega desagraida. Potser és que com tu m'ha tocat treballar I estar molt aprop dels esclosos (vaig ser educadora social) potser és que al ser conscient de la meva pertenyença a un grup exclos I oblidat (soc una persona amb una neurodegenerativa) potser el fet de viure en una de les ciutats amb més poder adquisitiu però de les més clasistes e insolidaries, això si de les que més és mobilitzen per l'independentisme. Potser perquè he viscut de masa prop el que és un veritable pres politic, potser per tantes coses que torno a gaudir de la meva llengua materna, el castellà I torno a escriure, llegir, pensar I gaudir d'aquella terra en la que vaig neixer I viure fins als once anys. Torno a dir soc una xarnega no agraida que estima moltisim a Catalunya però que tè clar que aquest no és el seu lloc, per això properament vull tornar a la meva Andalucia.

    ResponElimina
    Respostes
    1. Moltes i moltes i moltes gràcies per aquest comentari. M'emociona. Jo tinc dos cognoms catalans, però si haguessin prevalgut els cognoms de les mares, els meus dos cognoms haguéssin estat murcians i alacantins. Tal vegada aquí hi ha una proposta. A mi també m'ha fet pensar diferent el contacte amb els exclosos i els pensaments que es deriven d'aquest contacte, que és a l'origen de les meves idees sobre classes i pàtries.

      Elimina
  8. Portugal està molt be, hi vaig cada estiu, llàstima dels incendis, algu provoca centenars d 'incendis a l'estiu per questions inmobiliaries. Quan resolguin els incendis, allo serà el Paradis. Com diuen a Galicia, "menos mal que nos queda Portugal"

    ResponElimina
  9. En Portugal todos los niños reciben su educación en portugués.
    En Francia en Francés
    En Alemania en Alemán...........

    ResponElimina
  10. No home no, què has de ser mal català. A la vida el que som és bones persones o no tant, i això és l'únic que compte. Inclús entre els catalans que es consideren a si mateixos com els super catalans hi ha bones persones que l'únic que pretenen és fer el bé a quants més puguin, millor. Salut i ens trobarem a Portugal, hi anirem tants que ja no hi cabrem jajaa

    ResponElimina
  11. Comparteixo amb tu que fa temps que hi ha un declivi de la cultura catalana. No hi ha res pitjor per a la creació que creure's que el que un fa és el millor i no voler veure el que fa l'altre.
    Que no es publiquin assaigs bons, d'alta cultura, és un mal símptoma.
    Ara, cal ser humils i, com a mínim, fer bones traduccions o buscar en Iberlibro, heheee.

    ResponElimina
  12. A jo el que em passa és que em sento mal català i mal espanyol. Que me cerquin a on hi hagi un bon sofrit.

    ResponElimina