16 d’ag. 2018

Una efeméride amarilla

Resultat d'imatges de ripoll

El final del verano nos deja en las fauces de lo que van a ser las nuevas efemérides procesistas, de modo que uno no solo se siente nostálgico por el fin del buen tiempo, si no también asustado por el calendario que nos acecha. La pena es que hayan decidido empezar por una fecha tan triste como la del 17 de agosto, que debería ser un día de luto y de reflexión. De vez en cuando viene bien detenerse a reflexionar, pero el procesismo, en su necesidad de mostrar justamente esa idea del proceso que siempre avanza no puede detenerse ante nada. Hubo pensadores que contaron la visión lineal del tiempo histórico de todos los totalitarismos, y el procesismo secesionista catalán tampoco podía fallar en eso.

A mi me parece que los hechos del 17 de agosto de 2017 todavía no se han digerido bien, y que falta mucho por pensar. Pero el secesionismo catalán optó por pasar página a toda prisa y, en cualquier caso, aprovecharlo para sus fines. La ética de la convicción frente a la ética de la responsabilidad, otra vez. El día 17 de agosto de 2018 el Presidente Torra no participará en el acto de homenaje a las víctimas en Barcelona, si no que se irá a Ripoll para asistir a un acto "en favor de la convivencia". Como gracias a sus tuits sabemos lo que piensa el presidente de la convivencia, parece del todo lógico.

Los familiares de las víctimas han pedido a los políticos catalanes que se abstengan de usar la muerte de sus parientes en beneficio de una causa nacionalista, pero parece improbable que sean atendidas sus súplicas. El populismo nacionalista avanza sin detenerse en escrúpulos. Así, mientras el señorito Pablo Casado se pasea por las ciudades del sur en donde llegan los inmigrantes que cruzan el mar en barcas para alentar el miedo al extranjero, los jerifaltes del procés se recluyen en la Cataluña profunda para reivindicar sus raíces y su nación exclusiva.

Aparte de otras lecturas muy recomendables que estoy haciendo este verano, han pasado por mis manos el ensayo de Jordi Amat ("La conjura de los irresponsables", en Cuadernos Anagrama) y "La historia no ha terminado", Anagrama también), de Claudio Magris. Magris sigue siendo una referencia obligada cuando uno piensa sobre varias cuestiones, una de las cuales es el desafío de los micronacionalismos en Europa. Magris tiene la virtud de los grandes: más allá de compartir o no sus propuestas, uno descubre que puede poner palabras a las emociones, y convertirlas en sentimientos razonados. Magris contrapone los micronacionalismos (ademocráticos, populistas, regresivos e intolerantes) a la idea de un patriotismo "trascendido", democrático e inclusivo.

Vamos a ver cuales son las propuestas sobre convivencia del Presidente Torra en Ripoll, estoy sinceramente curioso. Aunque es probable que no diga nada interesante, cualquier pista podría ser una buena pista para saber qué nos depara el poder autonómico en el futuro inmediato, que se presenta demasiado incierto (otra vez). Los sucesos del 17 de agosto de hace un año no solo hablan de una violencia tan asesina como suicida, alentada por un identitarismo delirante, si no de la capacidad para integrar de nuestra sociedad. Cataluña, tierra de acogida ¿les suena de algo?.

Lidia Puigverd, una de las mayores expertas en el asunto, escribió lo mejor que he leído al respecto de los chicos de Ripoll que decidieron cruzar hacia el abismo de la tiniebla, pero Puigverd fue ferozmente atacada por el independentismo mainstream de forma inmediata y, que yo sepa, no ha sido jamás invitada a participar en ningún foro. Yo creo que Lidia Puigverd debería estar en Ripoll, también. Y debería ser consultada por el poder local. (Solo lo apunto: Puigverd es asesora para la Comisión Europea en asuntos de radicalización y violencia, pero ignorada en su propio país).

Me temo que el acto de Ripoll va a ser una andanada de identitarismo autocomplaciente como respuesta a otro identitarismo, una penosa pérdida de tiempo y de oportunidades de avanzar hacia algo parecido a la concordia y la paz y, aprovechando que el Pisuerga pasa por Valladolid (o el Ter por Ripoll), vamos a escuchar nuevas fantasías del micronacionalismo agresivo-defensivo. Ojalá vaya equivocado, pero creo que nos espera un aviso para el otoño catalán y que, muy posiblemente, se recuperará aquel "no tinc por" de hace un año, que no se refería a las víctimas del desastre si no, por más indigno que fuese, al desafío del 1 de octubre.

7 comentaris:

  1. A mi llega un momento que los políticos , sus estrategias y demás supuestas " obligaciones" para con sus votantes fieles me cansan una barbaridad.

    Y supongo que a ti idem , pero al menos tienes el valor de decir como te sientes o piensas.

    Besos.

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  2. Hola Lluís. ¿Podrías poner por favor algún enlace a las declaraciones de Lidia Puigverd ?

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  3. Recuerdo que hace años, muchos años, cuando Aldo Moro llevaba las riendas de Italia, se hablaba de aquel país como cuna de la mafia, y de los políticos de allí como algo raro y que sería impensable que aquello pudiera suceder aquí, en España en general y Catalunya en particular.

    El tiempo ha borrado toda duda. Los hemos superado. No hay comunidad que no esté tocada por la varita de las comisiones. Partido que no esté tocado por su financiación irregular. Grupo que no esté amonestado por la Justicia, y político que no haya traspasado la línea roja de la dignidad, porque lo que le interesa es, y cada vez estoy más convencido, el poder con el A8 oficial y la Visa correspondiente.

    No hay políticos de Estado. Que miren a 8 años vista. No hay Tarradellas que se caguen con el Suarez y se puteen con Anguita, mientras Fraga se muerde las uñas y el Pujol de la primera época (aquel si que era el gran Pujol) convocaba a todos a un pacto, si, a un pacto por las pensiones, la sanidad, la orfandad, la jubilación, y la caja de la Seguridad Social.

    Hoy, más de una generación después, nuestros políticos, los de fuera y los de casa, han empequeñecido, y se han convertido en devoradores de sofá, comisionistas, lerrouxistas y pasatiempiestas silloneros.

    De estos no me espero nada. Ni de los unos, ni de los otros.

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  4. Cuando ley el libro "Combatents en temps d'Ala" comence a ser consciente de que alguna cosa estabamos haciendo mal en Cataluña, porque resulta que la mayoria de los jovenes que se radicalizaban e incluso que se iban a luchar a Siria salian de aqui hablo de todo el estado español) me sorprende tambien que la mayoria de chistes, comentarios xenofobos... suelen venir de independentistas, la clave creo que esta ahi ¿Si les cuesta aceptar a los castellano hablantes, como es posible que acepten sin mas a los que llegan de más lejos? Hace unos dias, leyendo un articulo de La Vanguardia sobre Banyoles y su mayor indice de indepens, leo las declaraciones de una experta en islamismo quien defendia a ultranza que la integracion de los musulmanes venia vinculada a su ideologia indepen (si eres indepen estas integrado si no no....) asi no es dificil dilucidar que no tienen ni idea y que como siempre van a lo que van. Yo creo que la pregunta que desde hace tiempo esta en el aire es ¿Porque el bresol de Cataluña es tambien un bresol de terroristas?

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  5. Quiero decir salen de Cataluña teniendo como comparativa al estado español....

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  6. Iba a dilucidar mi derecho a decidir sobre escribir un democrático comentario, en tu democratico espacio. Mi democrática opinión es que ya está bien del uso torticero de la palabra democracia en todas las declaraciones, en todos los espacios y en todas las facetas.
    Yo considero que los políticos presos están bien en la cárcel porque tienen un demostrado y democrático riesgo de fuga, como han hecho sus cómplices y por eso mi democrática opinión es que tienen derecho a portar lacitos amarillos cuando quieran, pero no en actos oficiales, no en edificios oficiales, no con los medios públicos que son de todos y sobre todo, hoy y ayer en los homenajes a las víctimas, con perdón, se podían haber metido los democráticos lacitos por el democrático culo...
    No quiero hacer comparaciones, pero me recuerdan a cierto país europeo que ponía símbolos partidistas en todos los edificios públicos; símbolos de su partido, ojo al tema, y el que no les respetaba era un traidor, mal ciudadano y perseguido...

    Un saludo

    LLuis, si crees que me he excedido, borra este comentario, no me lo tomaré a mal...

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  7. no saps prou les partides de cul que em provoca llegir la teva obsessió paranoïca..encara que crec que la desaprofites ..enfí salut i força al Canut!!

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