El texto se ha inspirado en un post de Juan Cruz, quién a su vez se inspiró en Philipp Blom (o en Michel Foucault). Pero no está dedicado a ninguno de ellos, sinó a quién lo entiende, y a quién le ha aportado algunas ideas y frases.
Tu cuerpo es un cuerpo político como el mío, y en la cama (a veces en el sofá de tu casa) aprendemos a hacer política. El discurso del poder se presenta, nos pregunta. Le respondemos como podemos, como sabemos, como vamos aprendiendo. No es lo mismo arriba que abajo. Será por eso que, de lado, hablamos más, cuando estamos al mismo nivel. Pero a los dos nos gusta, a veces, subvertir el orden. O incluso experimentar como será eso de ofrecernos, sumisos. Arrodillarse es nefasto menos cuando lo pide el amor. Pero aún así hay que saber que arrodillarse significa ponerse de rodillas.
Y a veces nos gusta ordenar y mandar, y ver qué le pasa al alma cuando uno se sienta en el trono y se viste de general depravado. O desnudo y débil como un esclavo sin voluntad a tener en cuenta. Nuestros cuerpos han experimentado la democracia, la dictadura, la rebelión anarquista. Hemos sido ciudadanos, súbditos, esclavos, guerrilleros apátridas, terroristas, colectivizadores y príncipes. A cada posibilidad le ha seguido su opuesta. Incluso hemos abierto terceras vías. Y así, nuestras camas han recorrido los siglos y los mapas, las geografías.
Hay que construir, construir. Sin inmobiliarias, ni arquitectos, ni hipotecas. Un mundo nuevo que no se construirá ni en las urnas ni en los periódicos. No si antes no lo hemos construido en casa, en nuestros sueños. En la cocina, en el armario, en la nevera. En la ducha, bajo las sábanas, en la lista de la compra. En la elección del papel higiénico para limpiarse el culo, de la tienda en donde compro los pepinos y las zanahorias. En la forma como te quito las bragas o me inclino ante ti. Hay muchas formas de abrir las piernas y cada una es un gesto político que cambia el mundo.
Querer o amar: eso también es un gesto político. En silencio o hablando. Primar tu orgasmo o el mío, o tan sólo vivir en ese placer que no termina. Olvidarse del placer propio, pensar sólo en el tuyo, en tu orgasmo, y percibir que el tuyo me lleva al mío sin solución de continuidad. Rajoy o Rubalcaba o Izquierda Unida. La Caixa o Triodos, o la baldosa secreta. O el casino, o la bolsa de los hijos de puta en su infierno frígido, de números. Quizás incorporar a un tercero que nos ponga un espejo, yo qué se. Democracia de verdad o democracia de mierda, tu ganas y tienes cuatro años para sodomizarme mientras yo me callo, como dice Artur Mas. Someterme al poder o darme la vuelta de repente. Rendirse tiene sus beneficios, haz conmigo lo que quieras. No te creas, eso también me gusta. Abandonarse, abandonarme a ti. Para luego quemar las iglesias y asaltar las comisarías. Los curas arden, los Mossos de esquadra se rinden. Y yo me derrito.
Vamos a empezar por la acción directa. De tu cuerpo sobre el mío, o del revés.
Y al final, agotados por el esfuerzo, seamos esclavos o príncipes, hundiremos nuestro cuerpo entre las sábanas. Y en ese acto, siempre el último hasta que no volvemos a abrir los ojos, llevamos con nosotros sólo el postrer recuerdo de la vigilia, y no caben más esperanzas que las que albergan nuestros sueños. El resto hay que ganárselo cada día, y un día tras otro. El resto es política. Pero podemos seguir abandonándonos al sueño, para el que no es necesaria ninguna compañía.
E.H. March
la democracia está agotada, igual habría que volver al denostado sistema comunista, però tendríamos el mismoproblema, el factpr humano, que todo lo corrompe
ResponEliminaFrancesc: tal com van les coses, estic segur que la proposta comunista recuperarà adeptes, ni que sigui amb una fórmula renovada. Col·lectivització, cooperatives, etc.
ResponEliminaEstic en estat de xoc veient el cop d'estat dels "mercats" a Grècia i a Itàlia, i aquí en viurem un de més dissimulat en pocs dies. És inevitable qu tard o d'hora reaccionem, però tal com dic caldria començar per cadascun, dins de casa. Això del factir humà.
Pensa globalment, actua localment és un principi bàsic. Cada gest importa per transformar el món.
ResponEliminaGalderich: la consigna és clara, encara que -depèn de com la diguis- recordi l'eslògan del Capità Enciam. Salut i anarquia.
ResponEliminaEl sistema se descompone y a la democracia se le ve el plumero. Desde luego, yo no la voy a legitimidar. A organizarse y a luchar, pero desde fuera.
ResponEliminaJuan: a la democraci se la han vendido, y creo que eso nos deja fuera porqué no podemos recomprarla. Va a tener que ser desde fuera.
ResponEliminaEn cadascún dels nostres gestos hi ha una acció política. L'eslògan del capità enciam potser sembla una mica naïf, però no obstant, és potent.
ResponEliminaJuan, yo lucharia desde dentro y desde fuera. Si bien esta no es la democracia por la que se ha luchado, la abstención también es un gesto político. Y lo utilizan los que ganan. La mejor manera de protesta es votar algun partido minoritario. Que no utilicen mi (in)acción aquellos a los que les interesa que estemos inactivos.
Eulàlia: sí, tots els gestos i les accions tenen una repercussió política. El descrèdit dels polítics ens ha fet perdre de vista la nostra dimensió política, però hi és i ara segurament té més sentit recordar-la.
ResponEliminaSobre el dintre/fora de la política, jo sóc partidari d'anar a votar (i pensar bé què em convé, qui em defensa com a treballador i com a membre de la classe a la que pertanyo). Però alhora cal pensar i actuar també al marge del sistema de partits i parlaments: el carrer, la xarxa, etc.
Anava a fer un comentari graciós, pero veig que els comentaris que han deixat son seriosos...menys el capità enciam...
ResponEliminacom deia aquell "a las barricadas!"
La democràcia està venuda i vexada, i cal lluitar al carrer cada dia. Però no per això renunciar a la poca que ens queda. Votarem, no perquè ningú s'ho mereixi, sinó perquè ens ho mereixem.
ResponEliminaY al final, agotados por el esfuerzo, seamos esclavos o príncipes, hundiremos nuestro cuerpo entre las sábanas. Y en ese acto, siempre el último hasta que no volvemos a abrir los ojos, llevamos con nosotros sólo el postrer recuerdo de la vigilia, y no caben más esperanzas que las que albergan nuestros sueños. El resto hay que ganárselo cada día, y un día tras otro. El resto es política. Pero podemos seguir abandonándonos al sueño, para el que no es necesaria ninguna compañía.
ResponEliminaAris; no et deixis impressionar, pots deixar el comentari que vulguis. Com més contrastos millor.
ResponEliminaJoan: jo també penso que cal salvar la poca democràcia que queda, i sense perdre de vista que cal reformar-la a fons, i que cal sortir de defensar-nos amb els instruments que tinguem. El blog n'és un.
ResponEliminaEnric: és cert, i m'intriga saber si el comentari és un text propi (teu) o una cita. En qualsevol del dos casos -previ consentiment, etc- m'agradaria afegir-lo al text del post.
ResponEliminaLluís, el text del comentari és de collita pròpia. Pots fer-ne lliure ús. Serà un plaer.
ResponEliminaPer cert, tot i que va implícit en el comentari, m'ha agradat molt l'apunt. És molt educatiu com de didàctica i exemplificant pot ser una metàfora.
ResponEliminaMás que entrar en comentarios relativos a las primas riesgosas y las calidades democráticas y demás, tu entrada me ha llevado al Recuerda cuerpo de Cavafis, que no sé si conoces. Sí, debemos subvertir muchas cosas, collons, casi todo debemos subvertirlo, pero lo de darse me convence, y me convence mucho.
ResponEliminaComo siempre, me has hecho pensar y me has hecho reír: tu película de hoy es como esas del cine mudo pero en versión TDAH posmoderna. Una abraçada.
Enric, doncs gràcies, vaig a pensar com l'incorporo.
ResponEliminaEastriver: sí conozco a Kavafis, y no sé hasta qué punto estaba en la trastienda inconsciente durante la redacción. Vienen tiempos de subversión ahora ya obligatoria.
ResponEliminaFantástica idea eso del cine mudo en versión TDAH. Igual será que de tanto hablar y trabajar con el síndrome al final lo he oncorporado, como a Kavafis.
És un text que m'ha captivat. I en un dia com la jornada de reflexió (que de fet és una jornada una mica inútil!), res millor que aquest text.
ResponEliminaTambé penso que cal intentar salvar el que quedi de la democràcia actual. Potser un dia ens despertàrem i ens adonarem que ja és tan tard que ja serà difícil canviar el nou estatus polític i mundial que s'haurà creat.