2 de febr. 2021

La sinificación de Cataluña

Hace algunos años, un columnista catalán afirmó que a Jordi Pujol le veía aspecto de comerciante japonés. Era una de sus bromas. El escritor, más allá de comentar unos rasgos algo japoneses en el rostro del sátrapa regional, expuso su amor hacia el dinerito y los negocios, la gesticulación de vendedor de electrodomésticos y otras lindezas que no recuerdo muy bien.

Si lo he recordado (vagamente) a día de hoy es porque, a día de hoy, le veo ciertos rasgos chinos al gobierno autonómico, una indiscutible maniobra de aproximación a los métodos autoritarios de la lejana y enigmática China.

Pero antes de entrar en la sinificación de Cataluña, voy a contarles algo sobre el señor Josep Piqué.

Hace muy poco más de un año, a las puertas del virus (que Trump calificó de virus chino), vi una entrevista a Josep Piqué en TV2. Magnífica, como casi todas las de ese canal que ya se parece a lo más moderno, adelantado y europeo que tenemos en España (Tv3 podría aprender algo del canal).  En aquella entrevista, Piqué expuso una hipótesis que me pareció fascinante. Cito de memoria la alocución del que fue director general con Pujol y luego ministro de Aznar:

-Lo más interesante que nos ha enseñado la China es que no hace falta tener democracia para generar riqueza. Hasta hace poco pensábamos que la democracia fortalecía a las clases medias y a la creación de empresas, y que eso nos llevaba al progreso económico. La China demuestra que la democracia es innecesaria: se puede crecer económicamente sin necesidad de pasar por la democracia.

Me quedé fascinado ante la sinceridad del señor Piqué. Piqué, que ha transitado desde el PSUC hasta el Partido Popular pasando por el pujolismo, puede que sea algo así como un gurú que insufla inspiración en el gobiernillo regional de ahora. Sin duda, hay algo muy chino en la Cataluña procesista: los presidentes regionales se designan a dedo uno tras otro, sin mediar elecciones de ninguna clase. El pueblo no eligió a Puigdemont, ni a Torra ni al Asombroso Niño Barbudo. Nada indica que el próximo presidentito sea un cabeza de lista, pero eso ya lo veremos.

Una vez, no hace mucho, se pusieron unas urnas chinas disfrazadas de tupperware catalán, o unos tupperware chinos disfrazados de urnas catalanas.

A día de hoy, el gobiernillo convoca elecciones y luego las desconvoca. ¿No quedamos en que votar era sagrado?. A día de hoy, el gobiernillo intenta modificar los usos y costumbres del poble y decreta un horario muy raro para bares y restaurantes. Nos dice a qué hora debemos desayunar, todos juntos y al mismo tiempo: eso es algo que años atrás no hubiéramos dudado en calificar de chino. Ya lo ven: no es una ocurrencia china, si no una ocurrencia catalana.

A día de hoy, se nos permite ir a trabajar adónde nos toque pero no a solazarnos el fin de semana donde queramos. Hace pocos días, una patrulla de esa milicia de los Agentes Forestales me paró en una carretera enmedio de un monte solitario y me informó de que estaba a punto de cruzar un límite municipal. El joven miliciano imberbe me dijo:

-Le informo que está usted a punto de cruzar una frontera municipal. Yo se lo cuento de buen rollo y se lo digo por su bien. Pero sepa que los Mossos de Escuadra están patrullando y ellos se lo dirán de malos modos.

Saludé al miliciano y le agradecí sus buenas formas, su generosidad y su buenrollismo. Me fijé en su uniforme y sus insignias, buscando la estrella roja del partido comunista chino. A saber donde la llevaba.

1 comentari:

  1. Con una diferencia entre lo chino y lo fenicio, vamos, entre lo chino y lo nuestro, mi estimado; los chinos no regatean. No les parece serio. Ellos ponen un precio, intentan que sea competitivo, y se cierra con un apretón de manos que vale de firma y sello.

    Nosotros, como los del zoco (y les llamamos moros), regateamos siempre, a lo mezquino, es la costumbre fenicia, siria, mediterránea, es la costumbre ancestral de nuestros antepasados, regatear, ..el 7%...¿nnooo?, ostres, vale llavors el 3%...i cap Andorra ¡
    Regateamos hasta en Sanidad para los nuestros, de tal manera que nos importa una mierda cobrarle 1€ por receta a un pensionista de 700€ al mes, (nos hemos olvidado del asunto porque tenemos memoria frágil, ; si el estado no se hubiera puesto en su lugar , hoy estaríamos financiando las vacaciones del de Waterloo), de la misma manera que nos importa otra mierda pasar dinero de Sanidad al partido político que nos alimenta bajo contratas fraudulentas, sin que para ello nos importe un carajal suprimir plazas hospitalarias (Clinic) y tanto en pacientes como en profesionales, jubilando anticipadamente a estos últimos con un par de años de antelación y haciendo cargo a la Tesorería epañola, dado que la jubilación se paga desde Madrid, exonerando a más 100 profesionales del cargo de la sanidad catalana (Boi Ruiz )

    https://www.eldiario.es/catalunya/el-diari-de-la-sanitat/sacudida-sanidad-publica-boi-ruiz_132_4263731.html

    Hoy, todo aquello de nuestros próceres, a diferencia de los chinos, nos pasa factura.
    Salut

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