Al del medio de La Trinca le van a colgar una medallita un día de esos. Una medallita que no es otra que la muy patriótica medallita de san Jorge. Al del medio y a los otros dos de su grupillo, de quienes no sabemos muy bien si están vivos, muertos o zombificados.
Quien les colgará la medallita no es otro que nuestro Amado Sustituto del Amado Líder. Loado sea san Jorge.
Puesto que al del medio de La Trinca (ni a los otros dos) no le pueden colgar la medallita por sus méritos musicales (la aportación de La Trinca a la música universal es similar a la de Leonardo Dantés), cabe preguntarse a qué se debe el reconocimiento patrio. Yo tengo mi hipótesis, pero me la reservo.
Hay 43 condecorados más en la próxima entrega de medallitas. Entre ellos está un tipo que defraudó más de 10 millones de euros (1.660.000.000 pesetas para los antiguos como yo). Que el estado condecore a un defraudador al estado creo que solo es posible en una determinada fase grave de la disonancia cognitiva, pero eso lo dejo para los psicólogos. ¿Nos estarán preparando para que veamos normal una futura medallita a la señora Ferrusola?
Lo de la cruz del santo patrón es un drama contemporáneo, aunque viene de lejos como todo el mundo sabe. A la crucecita le pasa lo que le viene pasando al Premi d'Honor de les Lletres Catalanes: se premia a lo irrelevante, a condición de que sea tan malo como patriota. En el caso del premio de las letras catalanas, llegó a tal degradación que ya todo el mundo sabe que los premiados forman el cánon de la mala literatura. Los premiados forman el catálogo catalán de lo mediocre en literatura. Mediocre y patriota, valga la redundancia (literatura y patriotismo han sido oxímoron desde la noche de los tiempos).
Esa es una de nuestras desgracias. Y digo "desgracias" con pena, porqué entre los 44 condecorados en esta edición de la medallita del santo hay uno a quien conozco, y de quien se el valor y los frutos objetivos de su dedicación (durante más de 3 décadas) a la educación pública de calidad y para todos, su labor de más de 30 años en favor de la escuela de los desfavorecidos, su determinación por mejorar la vida futura de los excluídos.
Es por esta persona por quien lamento el pozo sin fondo en el que se cayó la medallita.
Me pregunto qué sucedería en las filas patrióticas de mi desdichada Cataluña si le diesen un premio Príncipe de Asturias a Cristiano Ronaldo o a Georgie Dann.
[Lo de Núria de Gispert, otra galardonada con la medallita, lo dejo para otro día, en un artículo que quizás llevará por título: "La noche de los muertos vividores"].
¡Creu de Sant Jordi para Estopa ya! (Estopa consiguió, durante un breve lapso de tiempo, el espejismo de una Cataluña cohesionada, tolerante y divertida).
Nuria de Gispert ya ha hecho los honores a tal premio con su tuit porcinofachanazi horas después.
ResponEliminaLo siento por el educador al que te refieres. 44 medallas... ¿cada año? A lo mejor debería haber sólo una. O quedar desierta. Y debería ser para tu profesional de la educación o similares. Pero supongo que si el universo da, al año y redondeando, 15 premios Nobel, o 10 premios Princesa de Asturias, elegidos a lo largo y ancho del mundo, Cataluña no puede menos que elegir a 44 personas universalmente reconocidas. 44 catalanes, por supuesto. Donde tu educador queda ensombrecido por un defraudador fiscal condenado, una racista convencida y cantantes de tercera cuyo ingenio quedó en su lugar hace décadas.
Eso, ni más ni menos, es la radiografía del nacionalismo.
Exacto. Me duele la situación en la que se va encontrar la única persona que creo que se merece un reconocimiento público, porqué las medallas de este año quedarán enturbiadas por ser el año de la medalla a un delincuente fiscal y a una xenófoba, y eso no es justo para quien lleva más de 30 años dándolo todo por la escuela pública.
EliminaTe insisto en Ortega, y en su ensayo " El orígen deportivo del estado", hace que hasta los intelectuales se hagan adictos al vencedor. Pero yo te recomiendo otro libro, y no es "La rebelión de las masas", que siendo bueno no se ajusta a lo que deseo llegar, sino a uno que escribió Elias Canetti, y que se llama "Masa y Poder" y desde donde podremos sacar unas conclusiones que nos dejarían pasmados.
ResponEliminaAl señor que te refieres le han dado el Sant Jordi porque actúa de motor de alienación (adormidera diría Marx). Ya sabes que la alienación es la pérdida de la identidad de una persona o de un colectivo, y de como pasamos de la creación del hombre por Dios a la creación de un dios por el hombre.
¿Quén coño puede dar un premio que representa el sentir de un país cuando el mismo señor estafa al país durante años?; cierto que es que el exlider de ese mismo país hizo ricos a bancos andorranos durante ventitantos. Aquí nada que alegar, y además hemos de trascender que el botín hermana más que cualquier bandera.
Borges dijo en cierta ocasión, LLUIS, que el fútbol era popular porque la idiotez también lo era; Borges era ciego, pero jamás fue un insensato.
Salut
Leí "El origen deportivo del estado" gracias a tu indicación, y eso te lo agradezco un montón. Lo de Canetti lo voy a buscar enseguida, puesto que de ese autor me gusta mucho lo leído. Sobre Borges: nada que comentar. Borges era lúcido, terriblemente lúcido.
EliminaPD: Me he olvidado de la susodicha:
ResponEliminaTodas las cosas tienen precio, menos las personas que tiene dignidad (Kant).
Ya está visto que hay personas que pasan a la categoría de "cosa" porque han perdido su dignidad.
Salut
Un abrazo de lo más fuerte..y busca en PDF Masa y Poder , es demasié y te abre los ojos.
Un abrazo
¡Gracias de nuevo!
EliminaL'autor ha eliminat aquest comentari.
ResponEliminaEl intento de justificar el fraude fiscal de los millonarios equiparándolo en porcentaje al de los pobres me parece muy lamentable, un silogismo penoso que no merece respuesta de ninguna clase. Estás en el primer círculo del infierno del Dante, Chiloé. Ni tan solo te mereces un círculo más digno. Por suerte el estado democrático sabe defenderse de los tramposos como tu.
EliminaUsted a mí no me tutee. Vuelva a insultarme y pediré una orden de alejamiento.
EliminaChiloé,
EliminaTe tuteo porque sí, porque me lo pide el cuerpo y porque me solidarizo con Lluís Bosch, a quien que no conozco pero que, por su inteligencia, claridad y lealtad a preceptos básicos de una sociedad democrática (de las de verdad), me encantaría conocer. Y sobre todo, por ende, porque está en las antípodas de ti.
Como te tuteo y digo de ti que estás en las antípodas de él, me merezco el mismo castigo y el honor de compartir una orden de alejamiento: ¿quién querría estar cerca de alguien que considera un delito fiscal algo nimio y perdonable? ¡¡Quita, quita, mejor lejos y con orden de alejamiento…!!
Alfredo
Yo únicamente trataba de reflejar hechos objetivos y ciertos, nada más. Les falta cabeza. Ni como enemigos valen ustedes. ¡Ah!, Don Alfredo Desconocido, a usted se le ve mucho el plumero
EliminaMessi no va estafar, si no sap sumar 2+2, tot va ser cosa del seu assesor fiscal, la creu de Sant Jordi li han donat per la seva contribució a la llengua catalana (es broma) però potser li han donat i ara en serio, lerquè a banda de ser el millor jugador de futbol de la historia, ha donat a conéixer Barcelona al món, i no aliena a la gent, la fa molt feliç i en fa dotze anys d'aixó.
ResponEliminaDe Gispert és per donar-li de menjar a part. Pensa que Messi és el que paga més impostos de tota Espanya i no es el que guanya mñes diners.
Salut
No entraremos en diatribas en página ajena, FRANCESC, amic. No lo haremos, pero no me negarás que mientras se mira a messi no se piensa en que el Millet está tomando cañas. (Igual pasa con Ronaldo , y ahí nada que decir).
ResponEliminaCuando hablo del concepto de alienación (Fuerbach), hablo del concepto de enajenación, que en este caso es sinónimo. Se pierde la identidad y se homogeiniza a la "masa" detrás del circo que se quiera, en este caso el fútbol. La actuación dura dos horas, donde patrono, amo, esclavo, negro, blanco, niño, hombre, mujer, carterista, obrero, gordos y flacos, machos alfa y homosexuales, altos y bajos sólo ven , opinan , hablan y desean una misma cosa...y allí y en ese instante de dos horas están alienados, nos guste o no, y ese es el concepto.
Ya te digo que aquí no discutiré sobre ello, no es mi página, y también te digo que Marx hoy lo llamaría el opio del pueblo, porque actua de adormidera, y en contraposición de la religión que lo hacía en su época.
Una abraçada
La verdad es que siempre he pensado que es muy indecente que gente cuya aportación a la sociedad es su habilidad para controlar una pelota gane lo que gana, sobre todo si lo comparamos con otros oficios como médicos o maestros. Que, además, defrauden a Hacienda (que es un atentado contra la única forma que tenemos de redistribuir mínimamente su inmerecida riqueza) y que los que mandan le pongan medallas y encima haya mucha gente dispuesta a defenderle dice muy poco a favor de nuestra sociedad.
ResponEliminaY no, el hecho de que haya otros individuos que le superan en ingresos inmerecidos y/o fraude a la hacienda pública no le justifica.
Gracias. Yo no pretendía decir nada más que eso, y no me esperaba una respuesta tan agresiva (y a la vez tan susceptible) como la que hay por aquí. Decidí no responder porqué no creo que lleve a nada bueno debatir con determinados puntos de vista amparados en el anonimato (o el pseudonimato) y la amenaza, aunque la amenaza tenga un cariz surrealista. O quizás por eso, uno evita determinadas discusiones. Sin embargo, siempre me pesa la imposibilidad de debatir. Lo que no haré, sin duda, es debatir sobre la moralidad de un jugador de fútbol que cobra més dinero que el PIB de varios países (pobres).
EliminaLas pasiones por el fútbol son, si no peores, sí bastante más ridículas que las pasiones religiosas (ámbito espiritual y/o metafísico) o políticas (ámbito social). Sólo así se explica que disculpemos en un futbolista cosas que no perdonaríamos a un dirigente religioso o político.
EliminaEn mi memoria el uso instrumental de esta pasión que hacía la dictadura franquista cuando en fechas señaladas (como el 1 de mayo) siempre se celebraba algún partido Barça-Madrid o similar para que la gente se quedase en casa mirándolo en vez de salir a la calle a manifestarse. Y una pena inmensa por ver que la gente sigue siendo igual de manipulable.
Y por otra parte, fuera del marco procesista ¿qué valor tiene una medalla patrocinada por un santo imaginario que, encima, sólo salió a pelear con el dragón cuando la afectada era la hija del rey y no antes, cuando las afectadas eran hijas de la plebe?
Sr J. VICENTE:
ResponElimina"...que la gente sigue siendo igual de manipulable." Justo a donde deseo llegar. Este es el verdadero concepto de "alienación"., o "enajenación", si se desea, o sea, la sustracción de la personalidad para pasar a formar parte de lo que desea, y ojo con la palabra, "el sistema".
Al "sistema" le va de maravilla tener cada semana un partido entre rivales; cuando hay partido no hay manifestaciones, por mucho que la barriga esté vacía. Hace además de nucleo para que los mensajes lleguen por igual, siendo independiente que uno sea de Vox y el de al lado su atítesis política, ahí los hermana y los utiliza. Y adormece la eterna pregunta del porqué unos ganan miles de euros diarios y otros están con la nevera por llenar, porque como se ve, si el que gana millones a porrillo es de los "mios", es más perdonable que el que gana millones a porrillo siendo de los "otros".
Un saludo afectuoso.
Lo de echar la culpa al fútbol de la alienación de la gente... A ver, con Franco tal y cual. Pero los sindicatos llevan deslegitimándose décadas. Especialmente en Cataluña. A ver si ahora la culpa de la poca participación el 1 de mayo la tiene Messi y no los líderes sindicales bailando el agua al nacionalismo, que vaya tela, lazos amarillos, nosaltres som el poble, etc etc, en franca colisión con los trabajadores y todo por algo tan pedestre como trincar la subvención correspondiente pagada por los... trabajadores a través de la Gene, es decir, de nuestros impuestos, y con una finalidad radicalmente distinta de los derechos de los trabajadores. No hay más, amigos. Los sindicatos están incapacitados, sobre todo insisto, en Cataluña, para hablar en nombre de nadie.
ResponEliminaEso sí, a los ladrones fiscales ni agua. Pero por otros motivos.
Y Messi no tiene culpa de nada de eso. Messi tiene culpa de intentar evadir los impuestos que le correspondían, no de traicionar a los trabajadores. Esta historia es responsabilidad exclusiva de los sindicatos
No hablo de Messi, particularizar a una persona no es de recibo, Sr JAVI. Hablo del fútbol y la rivalidad que crea el mismo sistema. Le invito a que lea alguno de los libros que he citado en el comienzo. Hablo de masa, de enajenación, de sistema, de estado, y en el estado entran los sindicatos e incluso la religión. Hablo de conceptos y de como se pueden manipular, como se manipulan los sindicatos (estado) a base de subvenciones.
ResponEliminaGracias por su atención
salut
Líbreme dios de culpabilizar a Messi de la alienación de la gente (pero sí del millonario fraude fiscal, por más que hayan otros muchos practicando el mismo delito). Yo mismo, si tuviera alguna habilidad por la que la sociedad estuviera dispuesta a pagarme un pastizal, lo aceptaría encantado, que uno intenta ser bueno pero no tonto.
ResponEliminaLo de la alienación es más complicado, aunque básicamente se apoya en tres patas: los que la organizan, los que colaboran para llevarla a cabo y los que se dejan alienar. Y cierto es que, así como en la dictadura las opciones eran simples (ver el partido y escapar ileso o ir a la mani y terminar golpeado/detenido/tiroteado) ahora el tema es más complejo porque la alternativa al fútbol no es tan lesiva y hay que tirar de otros resortes (uno de ellos, en efecto, el sobornar a los dirigentes sindicales).
Vamos, que hemos progresado adecuadamente, ya no hace falta aporrear o tirotear a los díscolos, basta con sobornar y desprestigiar a sus potenciales instigadores.
Lo que tampoco dice mucho a favor de los potenciales alienados. Antes era razonable que la gente evitara salir a jugarse la vida o la integridad física, ahora basta con la excusa de los dirigentes corruptos.