Imagínese que un juez le imputa a usted por fraude y malversación y que, cuando le preguntan sus amigos: ¿de qué te acusan? usted les responde: me acusan de independentista. Parece un chiste sobre catalanes demasiado fácil, pero no lo crean. Eso es exactamente, lo que hace la señora Laura Borràs, que preside un parlamente autonómico para más señas. Me queda la duda: ¿se da cuenta, la señora, de que sus declaraciones son poco más o menos un chiste rancio sobre catalanes?
Lo pone demasiado fácil la señora ya que, siendo filóloga, se supone que sabrá traducir correctamente. Luego, ya lo tienen: "independentista", en catalán, se traduce por "fraudulento y malversador" en castellano. Algunos nos lo habíamos imaginado, pero hasta ahora jamás una autoridad de la lengua nos lo había contado así de claro.
En el sainete independentista, la señora Borràs siempre ha tenido un buen papel y nos ha dado muchas alegrías, pero esa última es, verdaderamente, un giro. Parece que la obra se acerca a los últimos compases, y el asunto de la imputación podría ser el auténtico anticlímax: los más aguerridos enemigos de la señora no somos los constitucionalistas catalanes, si no sus socios de gobierno regional, independentistas como ella y en realidad muy parecidos a ella, solo que con un deseo de poder enorme: los socios de ERC ya han mostrado su nula intención de defenderla, con las ganas que le tenían.
Quienes vean diferencias de táctica, de estrategia o de algo entre ambos partidos del gobierno van equivocados: son casi idénticos y su única diferencia es que ambos quieren el poder y, a ser posible, borrando al adversario del mapa. Lo que más les gustaría es borrarlos pero no sin antes humillarles. Ahí está el señor Rufián, con su verbo escaso pero afilado.
Nombras dos personajes que me dan yu-yu, la Borrás y finalmente el Rufian.
ResponEliminaesto es la representación de los votos independentistas en el Senat o Congres o como quieran llamarle, es lo que son, o sea, analfabetismo funcional elevado a la enésima potencia.
Salut
Mirando el lado bueno, que estos dos personajes, con todas sus carencias intelectuales, y su cleptomanía ( en el caso de la Borrás ),sean la punta de lanza del independentismo, me tranquiliza algo.
ResponEliminaPorque nunca llegarán a ninguna parte, para eso se necesita talento, instinto, y "finezza".
Y estos dos, claramente carecen de todo eso.
El lado malo : el "pastón" que nos cuestan a los contribuyentes catalanes sus astracanadas, y el tiempo precioso que estamos perdiendo.
Un abrazo.