El feminismo es un movimiento político que lucha por la igualdad de las personas. Esta sería la definición más elemental, la más comprensible y la más fácil de compartir. Dicho de otro modo: ¿quién puede estar en contra de la igualdad? ¿Con qué argumentos se podría estar en contra? Bueno: la igualdad es algo que no gusta a todo el mundo, pero en estos casos lo mejor sería disimularlo. Hay que recordarlo: para defender la igualdad tuvieron que rodar algunas cabezas coronadas que se le oponían en nombre de algunos privilegios insostenibles.
Sin embargo... (¡siempre el sin embargo!) hoy en día alguien cuestiona al feminismo. Es fácil escuchar a quien dice que el feminismo actual es un "feminismo mal entendido" y se queda tan ancho. Son personas del mismo estilo que aquellas que hablaban de la "democracia mal entendida" en el principio de la Transición. Pero los defensores de una supuesta "democracia bien entendida" no eran demócratas si no todo lo contrario. También recordarán ustedes que se abogó por una "democracia a la española", de modo que hoy no es tan raro escuchar a quienes hablan de un "feminismo a la española": la buena española feminista es la que está embarazada y sigue trabajando, dijo alguien hace muy poco.
Hoy es 25N. Día internacional contra las violencias machistas. Y en cantidad de instituciones se ha conmemorado de alguna forma. Lo malo de los días internacionales de algo es que cansan y pierden el significado, y con el paso de los años se convierten en nuevas tradiciones -paganas pero tradiciones a fin de cuentas-, tan aburridas e insulsas como la Castanyada, el Dia de Pi de les Tres Branques o l'ou com balla.
Eso no quita que al feminicidio se le deba tomar muy en serio. Por poner un dato (a mucha gente solo se le puede hablar con datos para llamar su atención): la violencia machista ha matado a muchas más personas que ETA. Con una salvedad (que es otro dato): ETA desapareció, entregó las armas y se disolvió, con lo cual no hay más muertos en su terrible balance asesino.
Nadie puede estar en contra de la violencia, sea cual sea. Y aunque casi todo el mundo encuentra alguna excepción a la norma y en consecuencia justifica alguna forma de la violencia, ¿se puede estar en contra de ETA y a la vez soslayar a las víctimas de otras violencias o dudar de su existencia? Eso también parece muy difícil de argumentar.
Entiendo tu entrada, lo que no comprendo es lo de ETA y su comparación con el feminicidio, y no la entiendo porque no creo que ETA haya muerto, no vives allí y no sabes como funcionan los vascos y las vascas que son autóctonos con respecto al resto de los mortales que no lo son.
ResponEliminaETA habrá dejado de existir cuando se le dejen de hacer homenajes a los asesinos que la confortaron, cuando entregue los nombres de los asesinos de los 349 personas que se saben mataron porque dejaron su firma, cuando entres en un bar y te sirvan como a los restos de los paisanos y no te den de lado con el nombre de "maketo", como me pasó a mi.
Por lo demás respeto la entrada, esta y las otas de los otros 364 días del año hablando de las mujeres maltratadas.
salut
Precisamente,esta mañana comentando los problemas de un hijo,llegamos a la conclusión,que sería interesante cambiar el Ministerio de Igualdad,por el de la Vivienda,que tanto éxito tuvo en el franquismo.
ResponEliminaMiquel,muy acertado tus dos puntos de vista.Mildemonios,también.